Uno de los aspectos que recaban más interés dentro de la industria agroalimentaria es el alargamiento de la vida útil de los productos que se comercializan. Cualquier mejora que vaya encaminada a permitir ampliar el margen de caducidad de un producto conlleva inmediatamente una mayor permanencia en el lineal y una mayor amplitud en su distribución y exportación lo que se traduce directamente en un importante incremento de los beneficios económicos y posibilidades de distribución de ese producto.
Por ello no es novedad el alto interés y la extensa aplicación que se ha hecho en la agroalimentación de las nuevas tecnologías encaminadas a este objetivo y especialmente las aplicadas a los envases y sistemas de envasado. A este respecto es increíble la relevancia que han adquirido aplicaciones como las atmósferas modificadas o los envases activos en multitud de productos alimentarios verduras, carne, pescado…
Una de las empresas aragonesas más innovadoras sobre este tema y colaboradora del Parque Científico Tecnológico (PCTAD) es Artibal, empresa que cuenta con una amplia experiencia en proyectos de I+D y desarrollo de productos en el ámbito de los envases activos.
Un paso más en la aplicación de las nuevas tecnologías del envasado en agroalimentación lo constituyen los denominados “Envases inteligentes”. Desde el inicio de la actividad del PCTAD se ha visto el alto interés existente en la industria agroalimentaria sobre este tema así como la cantidad de tecnologías disponibles por lo que la divulgación y transferencia tecnológica al sector es crucial en la actualidad. El pasado 11 de mayo se celebró en el PCTAD un desayuno tecnológico centrado en estas tecnologías. A lo largo de la mañana se abordaron distintos aspectos sobre el estado actual de los envases inteligentes a nivel internacional. Al desayuno asistieron numerosas empresas de distintos ámbitos del sector agroalimentario para las que la aplicación de envases inteligentes en sus productos es de interés transversal y de futuro.
En el desayuno tecnológico se contó con la participación de los centros tecnológicos de AITIIP e ITENE. Así como la empresa Artibal, que realizaron distintas intervenciones en las que se desarrolló una descripción de algunas de las tecnologías más relevantes y de mayor aplicación en este ámbito como son los nuevos materiales, biosensores que informan al consumidor de la cercanía a la fecha de caducidad o al estado de maduración de algunos productos, tags de RFID que almacenan toda la información de logística y trazabilidad de temperatura y humedad sobre el alimento, etc.
La definición de envase inteligente es aquel que es capaz de monitorizar y comunicar información útil sobre lo que le ocurre al producto durante toda la cadena de suministro. Algunos de los más usados son:
Los que transportan datos:
–RFID
Los que indican:
–Indicadores de temperatura
–Indicadores de humedad
–Indicadores de frescura/vida útil
–Indicadores de fugas
–Indicadorescon tintas termocrómicas
–Biosensores
–Otros.
Es indudable que la aplicación de envases inteligentes no sólo aporta beneficios económicos para la empresa y en la seguridad alimentaria a los consumidores, sino que constituyen también una fuente de mejoras en cuanto a la sostenibilidad y mejora en los envases que constituyen un grave problema por el volumen de residuos que generan.